Mabon es una de las fiestas sabbaticas más importantes del año para aquellos que celebran el ciclo de la vida, la magia y el misterio de la naturaleza. Es una celebración de la llegada del equinoccio de otoño y la estación de la cosecha. Se conoce como la Fiesta de la Cosecha y el Festival de la Igualdad, donde se celebra el equilibrio entre la luz y la oscuridad, el verano y el invierno. Esta celebración tiene lugar el 21 de marzo en el hemisferio sur y el 21 de septiembre en el hemisferio norte.
Mabon es un tiempo para la gratitud y la reflexión. Es un momento para conectarse con la naturaleza y honrar el trabajo duro de la cosecha y un tiempo para dar gracias por todas las bendiciones. Es una oportunidad para conectar en profundidad con la Tierra y para honrar los ciclos de la vida.
Durante Mabon, aquellos que celebran el festival se centran en la gratitud y en la devoción. Esto incluye encender velas, hacer ofrendas, cantar canciones, hacer rituales, leer poemas, escribir poesía, comer alimentos de la cosecha, compartir historias y disfrutar de la belleza de la naturaleza.
Durante Mabon, está bien sentirse melancólico y triste. La tristeza y la melancolía pueden ser una parte importante del proceso de curación y de aceptación. Estas emociones nos ayudan a conectar con una profunda sabiduría. Por lo tanto, es importante aceptar estas emociones y permitir que fluyan.
Mabon es un recordatorio de que la vida es cíclica. Todo lo que sucede en la vida, tanto lo bueno como lo malo, no es permanente y pasará con el tiempo. Esto nos recuerda que siempre hay una luz al final del túnel. Recordar esto nos ayuda a mantener una actitud positiva y nos ayuda a disfrutar el momento.
Esta celebración también nos da la oportunidad de conectarnos con nuestras raíces, para conocer nuestra historia y comprender mejor nuestras propias vidas. Esto nos permite tomar una perspectiva amplia sobre nuestras vidas y honrar la sabiduría de aquellos que nos precedieron.
Mabon es una celebración de la naturaleza, de la vida y de la muerte. Es un momento para recordar que todas las cosas tienen un ciclo y para honrar la transición de una estación a otra. Es un tiempo para conectar con la naturaleza, para celebrar la magia y el misterio de la vida, y para honrar los ciclos de la vida.