¿Sabías que el café siempre ha estado muy ligado al esoterismo? Te contamos cómo leer los posos del café e interpretar las figuras.
La cafeomancia, también conocida como lectura del café, es una forma de adivinación o interpretación de símbolos que aparecen en los posos de café, té u otras bebidas después de ser consumidas. Esta práctica tiene una larga historia y ha sido parte de las tradiciones culturales en diversas partes del mundo, especialmente en el Medio Oriente, los Balcanes y algunas regiones de Europa.
Cómo se Realiza:
La cafeomancia se realiza generalmente de la siguiente manera:
La interpretación de los símbolos puede variar según la cultura y las creencias del lector. Algunas personas interpretan los símbolos de manera literal, mientras que otras pueden tomar un enfoque más simbólico o intuitivo. En la cafeomancia, se cree que los posos pueden proporcionar información sobre el pasado, el presente y el futuro, así como sobre asuntos personales, relaciones, salud y otros aspectos de la vida.
La cafeomancia tiene un valor cultural y social significativo en muchas comunidades. Además de ser una forma de adivinación, también es una oportunidad para la interacción social y el compartir de experiencias entre amigos y familiares.
Si bien la cafeomancia no está respaldada científicamente y se considera una práctica esotérica, sigue siendo una parte importante de la tradición cultural y espiritual en algunas partes del mundo, y es apreciada por quienes encuentran significado y conexión a través de ella.
Luna: fuerza, optimismo y energía. Combinada con una espiral significa una mala época económica y alerta de la necesidad de ahorrar y evitar gastos innecesarios.
Pez: ganancias, buenas noticias.
Cruces: los problemas se resolverán con bondad, generosidad y paciencia.
Espada: la justicia está de tu lado.
Oreja: debes aprender a escuchar los buenos consejos.
Rayo: celos, intrigas y conflictos.
Puente: simboliza un cambio social o laboral.
Herradura: suerte o viaje afortunado.
Tenedor: un conflicto que no está en tu mano resolver.
Sol: felicidad duradera.
Cuadrados: encasillamiento. Un solo cuadrado significa un nuevo negocio o trabajo con éxito.
Flecha: no vayas tan rápido, piensa antes de hacerlo.
Formas indefinidas y/o nubes: mala época, insatisfacción, tristeza e incluso depresión. Alerta de la necesidad de pasar página.
Una llave: nuevas oportunidades que debes afrontar con cautela.
Martillo: pérdidas en los negocios.
Hongo: solidaridad.
Perfil: hay alguien que te quiere y te está protegiendo.
Campana: asistirás a un acto religioso o noticia positiva muy esperada.
Uvas: estabilidad, premios o estímulos.
W: tiempos duros.
V: lucha más en tu trabajo, demuestra lo que vales.
Mariposa: sorpresa agradable, dinero inesperado, mejoría de la salud.
Araña: problemas de difícil solución, problemas familiares o judiciales.
Sombrero: protección, suerte.
Número 3: suerte en los juegos del azar, embarazo o la llegada de alguien.
Peine: cuida tu imagen. Mímate más.
Velas: tienes dudas y debes resolverlas.
Cadenas: situación de encadenamiento. Solo se liberará con fe y valentía.
Labios: fuerte atracción por alguien, pero cuidado puede no ser la persona adecuada.
Silla o trono: un nuevo puesto de trabajo o una nueva posición en la vida.
Árbol: búsqueda de protección.
Pájaros: renovación y cambio.
Líneas paralelas: conformismo.
Corazón: has elegido bien a tu pareja.
Círculo: advertencia para que se pare a reflexionar ante un inminente cambio. Varios círculos son advertencias a diferentes problemas.
Símbolo del infinito: o un ocho quieren decir buena suerte
Ventana: invitación para que tomes buenos rumbos.
Mano: alguien te va a ayudar.
Una X: cuidado con las inversiones y el dinero.
Triángulo: una persona mayor y de mejor posición te ayudará a mejorar tu posición laboral.
Una figura humana: un familiar fallecido nos está protegiendo.
Flor: propuestas de amor o amistad.
Estrella: sigue tu intuición, vas por el camino correcto.
Ahora ya sabes todo lo necesario para poder leer los posos del café, esta tarde puedes probarlo con tus amigos.
